Campos de astillas.
Olas de color tenebroso
se vienen conmgo a casa,
preguntan por el otoño en llamas
de mi criminal corazón y sus artimañas.
Los marineros divisan en la distancia
el peligro de la marea de mis aguas,
los veleros cambian de rumbo
al verme a mí tan peligrosa y rancia.
Nubes de monóxido cubren
las noches de luces tenues
que me acompañan en el camino
de casa a cama,de cama en casa,
de recto y tuerce.
La soledad se acopla a mi almohada,
me habla,me intuye,
me hiela,me abrasa,
me muerde,me acaricia.
Me cuenta que le gusta mi tacto
y yo le digo que por favor,
no me siga el rastro.
A Soledad le visita Melancolía,
y yo tan hospitalaria las dejo entrar,
así me cogerán cariño
y cuando menos se lo esperen,
les haré marchar,
pues entre amigos todo se habla,
se entiende y se calla.
Ahora veo sus sombras por el encinar,
caminan por tierras extremeñas,
su destino,el olivar.
Buen viaje amigas mías,
les deseo de forma peculiar,
a dos inquilinas de alquiler
que encontré en mi dormitar.
1 Comments:
me encantas...
me encantan las letras si es tu mano la que escribe ... con cada una contagias cada vez más optimismo, pese a que las visitas no sean las deseadas ...
Soledad y Melancolía: buenas noches, y buena suerte! Cuando menos lo esperen, las harás marchar ... Las volveremos a ver, sí, pero siempre con ese brillo en los ojos y esa sonrisa en la boca.
Flipi, por favor: préstame tus gafas de ver el mundo!
Post a Comment
<< Home