Every cloud has a silver lining

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monamour, morenamía, bonitamía

Lo que podíamos ser y no hemos sido. 

Y aunque no veas, aunque no me busques, no me he ido. 

Anhelo

Esta noche me acuerdo de Roma, de los cocos de Tailandia, de la terraza de Béjar, de las noches de series o peli, de las tortillas de patata, de las vueltas del cine a casa, a veces me vienen ráfagas de Cádiz, de paseos barceloneses de un verano que me quedé unos días más que de costumbre por allí, de una peli italiana y un sofá en Tenerife, algún recuerdo madrileño, o de algún paseo por playas gaditanas... A veces, a día de hoy, aún tengo momentos de echarte de menos. Qué gozada la libertad que he sentido junto a ti, eso nos lo agradezco muchísimo. Y la ternura. A día de hoy, tb, aún me vienen esos momentos de ternura, o flashes de tu pelo revuelto y tu cara despejada como a mi me gusta, o lo mullidito de tu moflete al besarlo, o de tu mano que aun dormida, buscaba hogar cuando me metía en la cama helada y se posaba sobre mis costillas.

Te he querido mucho y te quiero mucho

TIX3=Salida

El otro día fumé marihuana y podía ver todas las capas que había sobre mi original.

Bonita mía

Todos los días te espero, me faltas todos los días. 

La tía vinagre

Mi rayillo de luz. No he visto una luz igual. La luz del hacerlo todo fácil. Del buen presagio. Del a tu lado todo va a ir bien. La luz de la seguridad, de la estabilidad. La luz de la generosidad. La luz de la bondad más absoluta. La luz del cariño, del buen cuidado. La luz de la confianza. La luz de la alegría del vivir, del disfrutar. La luz de la ilusión por conocer mundos, calles, gentes, sabores... 

Te quiero y te agradezco todo lo que hemos compartido y lo que nos hemos dado.

Nos deseo seguir compartiendo y dándonos a lo largo de esta vida. Te quiero y te requiero almudejar. Tu rayillo de luz me acompaña y me guía. 

Mar Martín Martínez

Tres que se complementan. 

Triada, Trinidad, trilogía (Rocío Molina). 

Estamos constantemente entrando a binonios y rechazando que se pueden dar más de dos cosas al tiempo (Raúl Rodríguez). 

Las tres culturas conviven en Granada. 

Granada es la eterna frontera entre la noche y la mañana. (Val del Omar). Y qué hay entre ellas? La Madrugada. No son dos sin tres  (Teresa). 

Divide el libro en cuatro capítulos y en todos aparece el número tres. En el primero, el tres es un número impar; en el segundo, es un número aparte; en el tercero, es un número par, y en el cuarto es un número que nunca existió. Abre, además, el libro con una cita de García Lorca: "Pero el dos no ha sido nunca un número / porque es una angustia y su sombra".(Almudena Grandes) 

Imagen: Selva Rodríguez 

Trobar a faltar

No tenerte en mi vida, en mi día a día, no me parece la realidad. 

Quejío

 

El llanto salía de la capa más honda de dolor que me he conocido.

No sé ni qué decir

 

A partir de María, la filósofa

Delirio que en este caso fue real. Y pensar que después de tanta mofa, entiendo a la señora, vecina del levante peninsular.

Delirio que en este caso es... ¿real? 

Calma, mami

Cierto tipo de desconfianza viene por una madre dentro hiper protectora. Tengo que confiar en que ellas/os, las/los hijos, saben qué se hacen y hay que dejarlos que vuelen para que sepan valerse por sí mismos y cojan altura. No tengo que estar todo el tiempo encima y pendiente de qué hacen y cómo lo hacen. Que la madre les brinde su confianza en ellos, su apoyo y su generosidad para que siempre tengan un hogar al que volver. Que se tengan los unos a los otros, que puedan convivir en paz, pero que también puedan desarrollarse cada uno sin la desconfianza o el exceso de  protección del resto. 

Caminante, no hay camino...

Incertidumbre,disfrutarla. Vulnerabilidad,mostrarla. 

Qué bien me sabes

¿Puedo chorrear una fruta madura sobre tu cuerpo y después lamerte entera hasta que te acabe?

Pre del post

Enfermar de amor

Transversal e interseccionalmente

Confit, durante mucho tiempo a fuego muy bajo

 

Respírame dentro, respírame fuera,
y alivia el ardor del rojo clavel
que me está quemando la piel.
Grita en canal, abierta, vibrante,
envuelta en el almíbar
que deja a su paso mi boca.

Cattana, Lisístrata, trasnochadoras,
reponiendo de amor cada x horas,
cargando de más, siempre expuesta,
y a la aurora, rendida, se queda traspuesta.
De Nueva York tiene,
cuatro columnas de cieno.

El sueño batalla con una leve migraña,
pobre de él, no sirve su lucha. 
Si al cerrar los ojos, vuelve a la carga,
la carga confitada y se adueña de todo, de nuevo, la musa. 

Chamana

Tu voz, la mía, tu voz, la mía, la noche, los lobos, el fuego, la naturaleza voraz, tu poder, mis ríos fluyendo a través de tu energía, tus olas jugando por dentro de mi cuerpo. Tu voz, tu voz... Dejarse, dejarse... El trance, los canales abiertos de par en par. Tu caricia final y mi pelo en tus manos, lo único que me desconecta y me lleva a lo de antes de entrar. Tu voz detrás de mi cabeza, el aire, el suspirar, el resoplar, el ronrroneo, lo profundo. Nuevas dimensiones del amor. La sexualidad venida de otro lugar del universo. El entendimiento. El juego. El disfrutar. No hay tiempo ni lugar para salir de ahí. El reposo, la calma, la libertad, la sanación. Lo desconocido, el placer, la sorpresa. Ir de tu mano y con tus manos. Tu voz dura y penetrante, mi voz iniciante. Tu acompañar, el consuelo, el cariño, la dulzura. El aprendizaje. Un nuevo sentido que se superpone al resto. La energía concentrada y de repente por todas partes, sin caos. Tu voz, la mía, juntas, separadas. Tu voz,mi voz, tu voz,mi voz, tu voz,mi voz. Respuestas en mitad de una noche de lobos. Tu voz, tu voz, tu voz, tu voz, tu voz, tu voooOOOOooozzhhhhhhhhhhhhhhhh...